Hace una semana, un afamado endocrino internacional, al exponer el motivo de mi visita con este micro-resumen, me dijo que era una verdadera heroína y que en esta vida unos nacen para sufrir y otros para hacer sufrir. Que luego la gente se queja por cualquier tontería y no saben la de historias duras que hay por ahí, que no saben que hay gente como yo que después de tanta adversidad y sufrimiento, no solo ha sacado aprendizaje sino que sigue adelante con coraje y positivismo. Termino diciendo que este tipo de historias son las que hay que contar y poner en Facebook para que se le quite a la gente la tontería, la importancia personal y tanto ego insoportable. Me felicitó por la gran toma de conciencia que había tenido y con la sonrisa en los ojos nos pusimos manos a la obra para recuperar a este cuerpo que tanto ha pasado. Este es el micro-resumen que le dí y que me pidió le dejara para enseñar a la gente:
Si, mi vida ha sido bastante movidita e intensa. Ya mi nacimiento lo aventuraba. Cordón umbilical al cuello, me agarré al útero de mi madre y perdió el conocimiento al perder mucha sangre, no podían revivirme con baños de agua fría/caliente por lo que me pincharon adrenalina. No lloré. Mis padres inconscientemente querían un niño con lo cual para ser aceptada tuve que potenciar mi masculino con las consecuencias que eso tuvo…negación de mi feminidad. Fue abusada sexualmente con tan solo 6 años, he sufrido dos veces “mobbing” laboral y múltiples abusos emocionales y psicológicos a nivel personal. He estado a punto de morir 9 veces. Hasta que un día una persona me dijo que era tan Bella y tan digna que no me creía merecedora de ello. Ese día lloré como nunca y me prometí a mi misma iniciar el camino de esa Dicha, de cambiar el destino, de dejar de ser sufridora (pues en otras vidas ya había sido el que hacía sufrir) y ahora experimentar la Fusión de los opuestos. Esto fue en julio de 2014. Por eso al año siguiente el Universo puso el cómo conseguirlo y ahí se inició esa Ascensión que yo he llamado “Infierno” desde la vivencia humana:
Marzo 2015-diagnostican a mi padre cáncer de próstata y seguidamente cáncer linfático, con lo cual tengo que estar asistiéndolo para las sesiones de quimioterapia. Me recorro España con él de punta a punta para tratarlo mejor.
Mayo 2015-mi hijo intenta suicidarse y es ahí cuando comienza a soltar tanto dolor como guardaba. Yo soy diagnosticada de alto stress y comienzan a tratarme.
Julio 2015-mi novio comienza a cambiar. Me promete públicamente que vamos a lanzar nuestro proyecto conjunto, hacia un mes le di el Proyecto de empresa ya terminado por los asesores. Yo estaba desde octubre de 2013 en paro, con hipoteca y un hijo que mantener, por no querer acostarme con mi jefe y después de sufrir por segunda vez “mobbing” laboral, la primera vez fue en diciembre de 2008. Todo esto incrementaba mi stress.
Noviembre 2015-cinco alumnas de un curso que impartía mi novio, y al cual yo también acudía, quisieron apalearme para quitarme de en medio pues una de ellas estaba enamorada de mi novio, como no lo consiguieron metieron cizaña, me calumniaron y al final consiguieron que mi novio cayera en su trampa. Comenzaron meses muy duros para él y para mí.
Mayo 2016-a punto de irme a vivir debajo de un puente, por no tener trabajo ni paro ni nada, me llaman inesperadamente de una empresa para contratarme. Comienzo a trabajar en junio de 2016. Mi novio se queda blanco porque entiende que esto es un motivo más de separación por no tener dedicación plena para nuestro proyecto. Dejo de fumar.
Julio 2016-descubro que mi novio tiene muchas conquistas por ahí y desde hace años, eso enciende mi cólera. Me siento traicionada, no porque se acostara con ellas, que no lo hizo, sino por la falta de compromiso al 100% conmigo. Comienzo mis síntomas físicos y el rosario de médicos. Tengo calambres en las piernas, la planta de los pies me queman, el estómago con ardores insufribles que me hacían vomitar. Comienzan los dolores intensos de cabeza. Me hacen cincuentamil pruebas: de piernas, corazón, todos los órganos internos, cabeza, hormonales, reumáticas, neurológicas, sistema circulatorio, linfático….de todo.
Agosto 2016-mi novio me desprecia públicamente. Yo soy como una olla exprés a punto de estallar.
Octubre 2016-abandono a mi novio porque físicamente no puedo tirar de mí. Abandono también el yoga porque no puedo ponerme de rodillas y mis piernas me duelen muchísimo. Aquí es cuando comienzo a perder mucha flexibilidad y a soltar por mi boca tanto dolor. Dejo de tener la regla radicalmente, entro en la menopausia directamente. Dolor inmenso, me quedo con ganas de tener una niña. Me tragué yo solita el inmenso dolor….
Diciembre 2016-en dos meses engordé 20 kg de golpe.
Enero 2017-mi novio no soporta tanta verdad junta como llevaba diciéndole esos meses atrás, tanta culpa, que no le queda otra que decirme adiós personal y profesionalmente. Dolor mutuo inmenso.
Septiembre 2017-comienzo con una psicóloga porque no tengo ganas de seguir viviendo. Siento un agotamiento extremo. Seguimos con mi soltar emociones, pero siempre poco a poco pues este volcán que llevo dentro puede arrasar. Estuve tres meses con ella.
Diciembre 2017-me recomiendan un médico de medicina familiar para mis continuas contracturas musculares, que me dice que estoy a punto de petar. Es quien me dice de hacerme una microbiota y el análisis de proteínas (no era la primera vez que me decían que no tenía apenas proteína en sangre, que me faltaban ciertos aminoácidos esenciales).
Enero 2018-me dan resultado de la microbiota (no sabían cómo estaba viva con lo que salió) y comienzo un tratamiento de seis meses con bacterias. Comienzo a fumar por “mis nervios”, siento que algo gordo se avecina como así fue.
Marzo 2018-descubro accidentalmente que mi padre tiene Alzeihmer. Y aquí comenzó el final del principio. Año y medio dedicándome a él y lidiando con las mafias que le perseguían. Infierno, infierno.
Julio 2018-consigo sacarlo de donde vivía, de todas las mafias y llevarlo a otro lugar. Su Alzeihmer se estabiliza y mi familia me quita responsabilidad. Comienzo a sentir alivio por tanta carga como soportaba. Tuve un año de alivio. Comienzo a hacer Feldenkrais, luego qigong y a tener más ganas de vivir. Mientras me quito gente tóxica de mi vida y comienza a entrar la nueva.
Agosto 2019-nos dicen que mi padre tiene un cáncer peritoneal y que no pueden hacer nada. Cuatro meses después muere. Cada quince días estaba con él. Pude acompañarlo en su tramo final y calmarle su miedo a morir.
Septiembre 2019-el médico de medicina familiar me pone la dieta del ayuno intermitente (12 a 20 horas) durante 4 meses, está convencido que esta es la solución. Como a las 20 horas me desmayo en el trabajo, me la quita, me dice que a mi no me sienta bien y me pone una dieta hipocalórica que no me hace bajar ni un gramo. Harta de dietas de todo tipo, proteínicas, disociadas, hipocalóricas, ayunos,…..decido escuchar a mi cuerpo porque se que los tiros no van por ahí. Comienzo con otra psicóloga, tanto sacrificio de dietas para nada me hunde.
12 diciembre 2019-me operan de un carcinoma extensivo en la cara. El susto fue bárbaro y casi me quedo en la mesa de operaciones al ver esa luz cegadora, no soporto la luz intensa, cada vez me veo más hipersensible, de hecho estoy diagnosticada como persona altamente sensible (PAS).
2 enero 2020-muere mi padre. Mi padre no hacía más que decirme que viniera ya, sabía que le quedaba muy poco, estuvo aguantando, esperando a que me operaran para morir a nuestro lado y decirme lo que tenía que decirme….
9 enero 2020-dejo el tabaco definitivamente con hipnosis. Ni me acuerdo de él, ya no lo necesito para sostener “mis nervios”.
Febrero 2020-comienzo la remontada para sanarme y desde entonces estoy soltando las últimas emociones, dolor y todo aquello que estaba en esa olla, poco a poco para que no me estalle ni estalle a nadie. Las tres personas que me causaron tanto estrés ya no me lo causan: mi padre murió, mi hijo se liberó y está a punto de echar a volar y mi novio está a punto de morir para renacer cuan Ave Fénix. Por eso me estoy dedicando a mí en exclusiva desde el 9 de enero.
De todas las pruebas médicas que me hicieron en estos años, descartando tumores cerebrales, enfermedades degenerativas, cánceres y demás, lo que queda es lo siguiente:
- Exceso de peso (unos 30 kg). Hinchazón abdomen, gases.
- Reflujo esofágico. Deterioro esofágico y concha bullosa derecha. Laringe con moco espeso, frecuentes resfriados o infecciones de vías altas.
- Microbiota por los suelos.
- Intolerancia a la fructosa (descartada intolerancia a la lactosa y gluten).
- Migrañas con aura. Mareos casi perder conocimiento, bajadas de tensión.
- Rotura de menisco externo/rodilla derecha y rotura de menisco interno/rodilla izquierda. Fascitis plantar pie izquierdo, con tratamiento, y plantillas ortopédicas por pies valgos.
- 2 Protusiones discales en la L4-L5 y L5-S1.
- Tendencia continua a rectificarse las cervicales.
- Ahora mismo, toda la columna vertebral como una barra de hierro de tensa.
Y ESTO DE AQUÍ ABAJO, ES LO MISMO PERO DESDE UN PLANO EMOCIONAL MÁS PROFUNDO Y CON LA CORRESPONDIENTE “LECTURA” CONSCIENTE:
22 de febrero de 2016:
Mi novio me escribe: “Prefiero tener gente más o menos con el mismo nivel de información para cada actividad. Toda saturación, aunque interna o inconsciente desequilibra los grupos. Mira el grupo del Máster, saltó por los aires energéticamente en la mezcla. Aunque eso solo tiene un responsable, que soy yo por mezclar y no haberlo manejado bien al principio. El grupo se rompió, estaba ya zombie y totalmente roto y ya es inmanejable. Además, hay otras tendencias en él que impiden tener la académica como prioritaria y ya sobraba la actividad para casi todos. He de reiterar que soy responsable. No quiero que pase en los grupos nuevos. Quizá sí que hay que poner niveles”.
29 de junio de 2016:
Mi novio no me deja volver a sus clases: No, gracias por el interés pero ese grupo no es para ti. Tu ya llevas grupos, tengo que tener un nivel medio para que no haya “aprendices” y “superexpertos” que hagan imposible una dinámica manejable. Ya sabes.
22 de enero de 2017:
Y parece que después de aquello todo estaba aclarado y sin embargo no fue así. Me entero que mi novio mete a trabajar, como secretaria de su academia, a una de esas chicas del Master que decía iban por otros derroteros y con las que se comportaba como un “gigoló energético”, según sus palabras. Y me entero por ellas que yo era el obstáculo, el motivo por el que disolvió el grupo, el estigma, imagina la cara con la que me quedo después de ayudarle a desenmascarar la cosa. Hecho que se confirma viendo quien se ha quedado dentro de la academia y quien fuera. Y para confirmar la mentira en la que me tuvo, a finales de junio recibo la visita de una alumna suya que me dice que está enamorada de él y que él la mantiene a la espera desde hace cinco años. Imagina el cuerpo que se me queda. En 2012, nos declaramos pero él me dijo que aún no estaba preparado para un dar paso mayor, por lo que me pidió esperarle a que evolucionara. Le prometí esperarlo, con lo que eso supone. Cuatro años después me entero que va dando esperanzas a más de una, aunque no se declarase a ninguna más que a mí, aunque fueran solo conquistas para mantener una autoestima que no se tenía en pie. El hecho de mantener a esas mujeres pendientes de una declaración de amor, fue el detonante para saltar y gritar no solo mi dolor sino el de todas las mujeres maltratadas.
En 2015 le dí un proyecto social, en exclusiva, porque era la persona en la que más confiaba, y me dice ese verano, delante de mucha gente, que si le doy un millón de euros lo pone en marcha y que él dirige. Vuelve a darme esperanza públicamente y justo un año después me encuentro con él en un paso de peatones y se da media vuelta para no hablarnos, faltándome al respeto no solo a mí sino a mi hijo. Y no tiene la valentía de disculparse, ni la honestidad para explicarse. Dirige una academia en la que prioriza la infancia y le da la espalda precisamente a un niño que quiso quitarse la vida meses atrás hincándose una espada.
Y entonces le pregunté a ese ser humano, convertido en monstruo: ¿Eres consciente de todo lo que ha sucedido? Realmente ¿eres consciente del daño que has causado o prefieres no darte cuenta para no ver lo malvado que puedes llegar a ser? Te has pasado todos estos años yendo de víctima, diciéndonos a todos en tus cursos lo cruel que ha sido la vida contigo y en que te has convertido, ¿eres consciente de cómo ese victimismo te ha llevado a ser verdugo o perpetrador? ¿eres consciente? ¿Te das cuenta del gran egoismo que tienes? Este verano, gente muy cercana a ti han terminado de abrirme los ojos. No podía creerlo, me ha costado muchísimo aceptar que pudieras llegar a ser tan cruel, pero este verano tuve que rendirme ante la evidencia. Tocaste a mi hijo y eso fue la gota que colmó el vaso. ¿Eres consciente de la traición que me has tenido, eres realmente consciente? Confié en ti en todo momento, me puse en tus manos y dejé que fueras mi guía, te abrí mi corazón y me abandoné en ti. Me pusiste en manos de los mejores, me salvaste incluso de la muerte, fuiste mi mejor medicina siempre y cuando más entregada me tenías me hincas la espada por la espalda quedándome helada y en estado de shock. ¿Eres consciente? ¿Eres consciente de la cantidad de años que llevo esperando a que «resucites» porque me lo pediste y te amo? ¿Te das cuenta de lo que es realmente el amor? No has querido que pueda expresarte todo este dolor que lleva saliendo desde hace seis larguísimos meses por mi cuerpo y encima tu compañero me dice que respete tu silencio ¿Has respetado tu a mi ser?. ¿Has podido dormir tranquilo todos estos meses? No puedo más..no puedo más…no puedo más….Esa frase que me has oído decir tantas veces es VERDAD!!! Hoy ya no puedo más. No puedo más con esta garganta que tose y tose y no se cura porque NO HABLO y expreso lo que siento. No puedo más…levantarme por las mañanas e ir al trabajo para SUBSISTIR. No puedo mássssssssss y por eso, aunque sea por escrito, voy a soltar todo lo que no he dicho.
Si no empatizas más conmigo es porque no sabes lo que sucede. Porque con el corazón tan bondadoso que tienes es imposible que no te levantes de donde estás si supieras todo el dolor que hay aquí. Como me han dicho varias veces y últimamente, es inconsciencia lo que tienes, es ignorancia y por eso voy a abrirte los ojos con mi luz.
Llevo muchos años tragando y tragando lo indecible. Pero es que llevo toda la vida haciéndolo. Con seis años fui violada y como sería esa escena que mi mente bloqueó los recuerdos y costó un huevo volver a recuperarlos. No tenía himen, mis amiguitas de ocho años hablaban de eso y yo veía que no podía hablar porque no tenía himen. Cuando tuve mi primera relación sexual lo comprobé, nunca sangré y siempre le decía a todos los hombres que no me hicieran daño. Me he pasado la vida pidiendo al hombre que no haga daño a esta mujer delicada. Ponte por un momento en mi lugar, se el personaje de esta historia y mira a esta niña tan asustada como tu niño y atiéndela con mucho amor. Entonces comprenderás a tu niño. Fue un amigo de mi padre el que lo hizo y yo no sabía por qué me daba asco ni por qué él siempre estaba ahí acechándome. Pero claro, a quien iba a contar esto, pensarían que era imaginaciones mías. Igual que cuando el padre de una niña del colegio pegaba a su hija con la hebilla de la correa y yo lo Veía antes de que lo supieran los demás. Estaba loca, mi madre me lo decía, si seguía diciendo todo esto me encerrarían en un lugar llamado MANICOMIO donde uno perdia la libertad y no volvía a ver a sus padres jamás. Palabras mágicas para que sellara mi boca durante larguísimos años hasta que apareciste tú. Un ser humano que me escuchaba y le decía a su mejor amigo que yo era especial para él. ¿Puedes imaginar por un momento lo que sentí cuando descubrí esto? Pues te lo cuento. Sentí SALVACIÓN. Sentí que por fin había un ser humano en la tierra que me comprendía. Con ocho años sabía quién era y que estaba aquí para una misión. Encontrar muchos años después al compañero de esa misión…..es….(estoy llorando)…no tengo palabras. No tendría hojas ni tiempo para expresar el calvario que pasé hasta entonces. Pero las múltiples veces que estuve a punto de morir hablan. Pues bien, encuentro a mi compañero de misión y mira por donde él no RECUERDA. Que putada, pero que putada más grande,….no podía creerlo. (Tengo que parar me ha entrado una tos insoportable). Imagina que soy yo, metete en mi personaje, como el buen actor que eres. Sigo…..Te conozco de forma “normal” para mi, a través del sueño, y te veo físicamente un día, después de sortear tus miedos humanos. Nada más vernos nos RECONOCEMOS. Nuestros avatares se reconocen. Me prometes volver a vernos y ahí comienza el calvario de promesas incumplidas. Me muestras tu ego, tu modelo egoico, Peter Pan y sus Wendies y ahí comienza el rosario de mujeres que hacen lo imposible para que no estemos juntos. Las conquistas a todas, te conviertes en un “gigoló energético” para no dejar al gigoló superficial que eras antes. Y yo mientras tanto, haciendo el papel de comprensiva, leal y elevada. MIERDA PURA!!!!! Cuando llegaba a casa lo pagaba con quien estaba a mi lado hasta que se hartaron de oírme. Estaban hartos de oir como esta decía públicamente lo enamorada que estaba de ti y que se iba a quitar a todas de en medio. Y como tu, te escondías de mi cuando estabas con ella. Ahí fue cuando descubrí…..(acabo de vomitar flemas por un tubo)….Cuando descubrí que eras un Peter Pan que querías un harén con prostitutas y en otra habitación a tu diosa. Y yo….gilipollas, más puta que todas las putas, me vendí y acepté ser tu diosa dentro de ese harén, de esa infidelidad que hablaba de todo menos de amor verdadero. Y como consentí llegaron muchas más.….hasta que llegó la definitiva… y me abrió los ojos. Ese fue el final. Sentír, sentir tu traición…..me mató. Literalmente ME MATÓ. Mil años ….mil años…. creyéndome tus mentiras, jugando a tu juego para complacerte, para terminar descubriendo que yo no era TU, tu SOLAMENTE TÚ. Eso me hundió y me lancé a los brazos del mejor postor, tu “gemelo”, para que sintieras lo que estaba sintiendo yo. TRAICIÓN, eso fue lo que sentí. Una TRAICIÓN profunda. Tantos y tantos años de evolución consciente y compartida, de un tu con tu para liberarnos y de la noche a la mañana llega una y desmorona todo. Porque las del Master se quedaron en nada cuando llegó la última. Eran como una anécdota frente a lo que ella me contaba. Y encima le decías públicamente que ”tenía un mapa estupendo pero que se adaptara al territorio”. ¿Un mapa estupendo? Está claro que tenías permitido lo que las mujeres no tenemos. Yo tenía que perdonar tus deslices mientras tú no podías perdonar los míos. MACHISMO, una vez más. Estoy aquí para liberar a la mujer junto a hombres conscientes. Así que tu machismo, una(s) diosa(s) y un harén, están en contra de mi misión. Ese fue el motivo por el que me fui de tu lado aún amándote como nunca he amado a nadie.
25 de enero de 2017:
Después de esta Verdad, así en crudo, decide decirme adiós con tan solo unas frases defensivas, de personaje narcisista herido y mentiroso: No voy a admitirte después de los cientos de correos que sigues enviando y de lo que pones en ellos. Estoy más que cansado de tus presiones, tu falta de respeto hacia mi y mi libertad. No quiero ningún trato. Nunca lo quise de modo personal. Ya tampoco profesional.
12 de abril de 2020:
Hasta hace poco, escribiendo mi último libro, no me dí cuenta que ya te había perdonado y de que tú estabas avergonzado por ello (¿Te has perdonado y me has perdonado?).
Hace tan solo unos días me hicieron ver que a la que no había perdonado era a mí misma. No me había perdonado no ser tan inteligente como pensaba cuando repetí el viejo patrón que tenía con los hombres, de escribir y escribir y no sacar valentía para hablarlo de frente y al momento; ni tener el control como suponía cuando me engañaron tan fácilmente; ni ser tan buena gente cuando escribí tremendas crueldades por tanto aguantar y aguantar. No me había perdonado ser la elegida de papá y la odiada de mamá y repetir el patrón con mis parejas (ser la elegida) y la rival con «las otras». No me había perdonado seguir a mamá en su crueldad y dureza y a papá en su ingenuidad y bondad. No me había perdonado rechazar a la mujer que soy por el niño que nunca fuí.
La Vida nos ha parado en seco y de forma contundente para resolver lo que teníamos pendiente. Para terminar de mirarnos a fondo y desgarrarnos por dentro. Para soltar el control, humildarnos y amar de la forma más incondicional que podamos, a nosotros mismos y al otro, conscientes de que no hay separación. Ni victima ni perpetrador o ambos. Este es el camino de la Fusión de los opuestos, la Ascensión.